miércoles, 5 de junio de 2013

ESPERARÉ BAJO EL MUÉRDAGO; capítulo nueve.

23 de diciembre; por la mañana.

-¡Buenos días, buenos días, buenos días!

Me doy la vuelta en la cama e intento seguir durmiendo, pero la voz no deja de sonar.

-Mmmm… -abro un ojo y veo la cara de Violet justo delante de la mía.
-Te llaman –sonríe y me tiende el teléfono de la casa.

Estoy lo suficientemente dormida como para no recordar que al estar en Inglaterra, quizás debería responder en inglés. Sin embargo, esta vez acierto con el idioma.

-¿Sí? –pregunto en español.
-¡Hola!  -el escuchar la voz de mi madre hace que me despierte totalmente- ¿Cómo estás, cielo?
-¡Mamá! Quería llamarte, pero no he podido… Bueno, no estoy del todo mal; me voy empezando a acostumbrar a esto.
-¿Sí? Me alegro –noto su voz algo aliviada.
-¿Y tú? ¿Qué tal? ¿Tu jefe te está sobreexplotando demasiado?
-No, sólo me sobreexplota un poco –bromea.

Ambas reímos, y me doy cuenta de lo mucho que la echo de menos. Desde que vivimos ella y yo solas, nos hemos unido mucho.

-¿Qué tal con tu padre? ¿Os va bien?
-Sí –contesto con sinceridad-. Mejor de lo que esperaba. Aunque no está mucho en casa, y Marga tampoco.

Veo que Violet, que sigue allí, frunce  el ceño y se va correteando; se ve que le aburre escuchar hablar en un idioma que no entiende.

-Entonces, ¿estás allí sola?
-No, no. La pequeña Violet está aquí –dudo un momento, no sé si decirle lo de Zayn-. Además, hay también un chico que cuida de ella.
-¿Un chico? –muestra especial interés.
-Sí, bueno, es como el cuidador de la casa y el niñero de Violet –explico.
-¿Es guapo?
-¡Mamá!
-¿Pero lo es?
-Sí –admito, y me sonrojo aunque esté sola en la habitación.
-Bueno, no olvides que cuando vuelvas la gente que había cuando te fuiste seguirá estando aquí –dice mi madre; estoy segura de que intuye lo que pasó con Jaime y me lo dice por eso.
-Ya lo sé, mamá…
-Pero eso no significa que no puedas pasártelo bien –me la imagino guiñándome un ojo-. Sé que harás lo mejor, cielo.

Sonrío.

-Gracias.
-Bueno, tengo que dejarte que se me acaba el descanso –su voz se vuelve apresurada-. Llámame cuando puedas o mándame algún sms. Y pásalo bien. ¡Te quiero!
-Sí, mamá. Yo también te quiero.

Mi madre cuelga, y Violet vuelve a entrar en la habitación, ahora con su gatito en los brazos.

-¿Ya? -pregunta.
-Sí. ¿Te lo llevas tú a su sitio, por favor? No sé dónde es –le pido.
-¡Claro! Vamos, Whiskers, vamos a llevar el teléfono –lo coge y sale del dormitorio.

Me levanto de la cama y busco algo que ponerme. Bueno, al menos ya he hablado con mamá y sus palabras me han tranquilizado. Quizás tenga razón y lo que tengo que hacer es pasarlo bien.

Me pongo unos pantalones de chándal y una sudadera en la que pone “First love, last love”. Me recojo el pelo en una cola no demasiado elaborada y salgo de mi cuarto para ir al baño. No creo que haya nadie dentro, pero antes de entrar toco a la puerta no sea que me encuentre con la misma situación de ayer. Y sería bastante incómodo volver a tener delante de mí a Zayn desnudo.

-¿Hoy también querías echarle un ojo a esto? –escucho la voz de Zayn a mi lado; miro y se está señalando a sí mismo.
-No, precisamente por eso he tocado. Y buenos días a ti también –sonrío irónicamente.
-Vaya, perdona, my darling. Soy un maleducado. Buenos días –él sonríe abiertamente.

No sé si entrar o no al baño, pues Zayn me está observando atentamente.

-¿Quieres algo? –pregunto lo más cortésmente que puedo.
-Con mirarte me basta –me guiña un ojo.

Noto cómo la sangre de toda mi cara parece amontonarse en mis mejillas, provocando que me sonroje. Definitivamente, necesito ir a un médico a mirarme ese problema.

-Lo siento por tus ojos –me encojo de hombros, intentando quitarle la importancia que siento que ha tenido al comentario.
-Vamos, no seas tonta. ¿Tú también eres así? –pone los ojos en blanco.
-¿Así cómo? –frunzo el ceño.
-Pues como todas las chicas. “No soy guapa” –pone voz aguda-. La mitad lo que quieren es que les digan que sí lo son.
-Pero la otra mitad no. Mira, Zayn the vain, no todo el mundo está tan contento consigo mismo como tú –ladeo la cabeza.
-Ya, es que eso es bastante difícil –sonríe con prepotencia-. Pero hay un término medio.
-¿Cuál? –el tema me está empezando a molestar- Si las chicas se dicen a sí mismas feas, es que quieren que los demás les digan que son guapas. Si se dicen guapas, son unas creídas a las que la gente desprecia.
-El término medio sería aceptar un cumplido sin decir ni “no lo soy” ni “ya lo sé”.

La verdad es que me quedo sin argumentos.

-Bien, pues gracias por el cumplido –entro al baño y cierro la puerta tras de mí.

No quiero pelearme con Zayn, y las conversaciones sobre la autoestima me enfadan bastante. ¿Qué más me da si la gente piensa que soy guapa? Si yo no me veo así, pues no me veo. Entonces… Zayn cree… que soy guapa. Vaya. O esa sensación me ha dado. Veo en el espejo que se me dibuja una sonrisa tonta en la cara.

Me lavo la cara y hago pis rápidamente, pero Zayn ya se ha ido del pasillo. Debí suponerlo. Aunque seguramente me lo encuentre en cualquier momento en cualquier parte. Voy a bajar a desayunar y, al pasar por la puerta del cuarto de Violet, escucho voces.

-¡No, socorro, sálvame, mi príncipe! –reconozco la vocecilla de mi hermana.
-¡Ya voy, mi princesa! ¡Esperad, antes tengo que matar al dragón que custodia la torre! –ésa es la voz de Zayn.
-¡Corred, mi príncipe!

Me asomo sigilosamente por la rendija que queda en la puerta entreabierta, y les veo a los dos sentados en el suelo junto a un gran castillo rosa de muñecas. Violet tiene en su mano a una muñeca de largo pelo rubio y Zayn tiene a un príncipe del mismo tamaño que forcejea con un dragón de peluche. La pequeña acaricia inconscientemente a Whiskers mientras observa el combate. Al final, el dragón cae derrotado y el príncipe puede rescatar a la princesa. La historia concluye por el momento con una petición de matrimonio por parte del caballero.

Sonrío. La verdad es que Zayn no da la sensación de tener esa faceta tan paternal, pero lo hace muy bien. Violet lo adora, y se nota que él también la quiere a ella. Es una escena muy bonita, y aparto la cara de la rendija antes de que me vean y la estropee, pero escucho algo que me obliga a quedarme.

-¿Tú también vas a casarte con mi hermana? –pregunta Violet.

Contengo una risilla, de la que Zayn, sin embargo, no se priva.

-Ahora mismo no lo creo –contesta.
-¿Pero sois novios? –lo mira atentamente.
-No que yo sepa.
-No lo entiendo –se cruza de brazos.
-¿Qué no entiendes, pequeñaja? –Zayn la coge por las axilas y la sienta en sus piernas.
-Si os besáis como hacen papá y mamá… ¿no sois novios?
-Mmmm… Somos un poco menos de novios –añade:- creo.
-¿Te gusta?

Escucho con atención. No quiero perderme la respuesta.

-Sí –sonríe.
-¡Bien! A mí también me gusta. Como hermana. Me gustaría que os casarais –hace palmas, feliz.
-Bueno, no sé si ella querrá casarse conmigo –Zayn le da con el dedo a Violet en la nariz, y ella cierra los ojos, riendo.
-Pues pídeselo –dice.

El que ellos no sepan que estoy escuchando la conversación hace que yo sea consciente de que las respuestas son totalmente –o al menos relativamente- sinceras.

-¿Te cuento un secreto? –Zayn la mira con cariño.
-¡Sí!
-Pero no se lo puedes decir a tu hermana –la advierte.
-Vale –asiente con la cabeza, reiterando su postura.
-Está bien. Tu hermana me gusta… mucho –se sincera-. Aunque sólo la conozco desde hace un par de días, pero ya he descubierto más o menos como es, y me gusta –parece más bien hablar para sí.
-¡Ve al grano! –le insta la pequeña.
-¡Bueno, bueno! Pues… seguramente me dirá que no, pero antes de que se vaya de aquí quiero pedirle que sea mi novia.

Violet se lleva las manos a la boca, sorprendida.

-¡Eso es casi como casarse! –exclama.
-Bueno… no tanto –Zayn ríe.
-Seguro que te dirá que sí –le anima ella.
-¿Tú crees?
-Estoy segura –sonríe.


Me doy cuenta de que he estado escuchando la conversación como si no tuviera que ver conmigo. ¡Le gusto! ¡Le gusto mucho! O eso ha dicho. Y si creo que hay una persona a la que no le mentiría es a Violet. Al ser consciente de que están hablando de mí, de que es a mí a quien se lo va a pedir algún día si las cosas siguen así, me pregunto… ¿qué le contestaría? ¿Le diría que sí? Me alejo silenciosamente de la habitación mientras pienso la respuesta. Lo que quizás no estoy teniendo en cuenta es que muchas veces los planes se estropean, las cosas previstas se cancelan, y al final acaba ocurriendo lo más inesperado. 

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12 comentarios:

  1. Madre... me huele a mi que muchas cosas inesperadas van a pasar .. muy buenaaa sigue asi y conseguiras que me haga directioner solo por esto jajaja :))

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  2. No por favor!! Que no pasen cosas inesperadas que siempre hace que se separen o se peleen D: Es tan hermosa, la amé!!

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  3. Naaaa! Me Encanta..! De Verdad, Es Muuy buena. Estoy Pensando Que Algo Inesperado Pasara... Siguela...! Sos Una GENIA =)te adorooooooo

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  4. la amo!!! síguela!!!! sino me moriré JAJAJA :D

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  5. OMG ♥.♥ Me encanta, me encanta, me encanta!!!!! Quiero que estén juntos YA!! Solo te pido que no los separes pliiis :(
    Tu fan number one :*

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  6. OH DIOS ME HA ENCANTADO. POR FAVOR SIGUELA PRONTO Y PERDONA QUE ESCRIBA EN MAYÚSCULAS, AL VERDAD NO SÉ POR QUÉ LO HAGO Y ENCIMA NO PARO...Ya está ajajaja, un besote y sigue así <3

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  7. Me encantaa!! Continua prontito, please !!

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  8. Siguelaaaa porfaplis:)!!

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  9. PERFECCION...*--------------------*

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  10. Me encanta de verdad <3.
    Quiero saber que va a pasar, por favor escribe pronto <3.

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