Yo
estaba allí, subida en mi improvisado escenario. No es que me molestase, de
hecho estaba rebosante de alegría –por primera vez en mucho tiempo- por estar
subida en esa barra, aunque notaba algo húmedo en la pierna y era que
seguramente le había dado una patada a la copa de alguien. No me importó.
Y
entonces juro, sí, lo juro, que estaba convencida de que Niall iba a besarme.
No sé muy bien si era por la forma en que se estaba acercando a mí, con esa
sonrisa en los labios, o porque mi subconsciente no me permitía desear o pensar
en otra cosa, pero tenía la absoluta certeza de que me besaría. Cuando
consiguió abrirse paso entre la gente que se había agolpado alrededor de la
barra, empezó a subir igual que yo lo había hecho unos minutos antes…
Alto,
alto, alto, alto.
No
sabéis la historia, ¿verdad? No, claro que no. No tenéis ni idea de quién es
Niall ni de qué narices hacía yo subida en una barra de un bar. Por favor, no
penséis mal ni imaginéis cosas extrañas. Quizás os debería contar esto desde el
principio, porque tampoco sé de qué otro modo podríais entender lo que estaba
pasando esa noche.
Os
voy a ser sincera. Mi vida no tiene nada de impresionante. No es la historia de
un personaje ilustre que merezca ser recordado durante siglos, y estoy segura
de que tardarán poco en olvidarme el día en que yo ya no esté. Tampoco es una
historia de esas que hacen llorar incluso a las piedras, porque sería bastante
injusto intentar convenceros de que mi vida ha sido trágica si la comparamos
con la de mucha gente. Es, simple y llanamente, una historia normal sobre la
vida de una chica normal. No os engañéis, a una chica cualquiera le pueden
pasar muchísimas cosas dignas de contar, y quizás algunos de vosotros lo sepáis
por vuestras propias experiencias.
Sólo
digo que no hay dragones, ni princesas, ni tampoco príncipes. Hay amistad,
inseguridad, tensión, alegría, sueños, y una chica y un chico. Bueno, visto así
no está tan mal, aunque puede que haya sonado demasiado a tráiler de película.
O a sinopsis de una novela. Juzgad vosotros mismos.
CAPÍTULO
1
Nunca
fui una chica especial. No era la que todos los chicos ponían al principio de
su lista de las más atractivas. No era aquella que siempre estaba rodeada de
decenas de personas porque tenía unas dotes incompresinbles –casi mágicas- para
hacer amigos. No era la atlética que conseguía medallas, ni tampoco la que ignoraba
las opiniones que los demás tenían sobre ella como si, en cualquier caso,
dichas opiniones crearan una coraza aún más fuerte en torno a su cuerpo y la
elevaran poco a poco en un pedestal. Tampoco era la chica a la que las demás
odiaban y que era la novia del capitán del equipo de fútbol –o baloncesto-. Ni
siquiera era la callada que sacaba las mejores notas de la clase. No era nada.
Nada de eso, me refiero. Existir, existía, porque ya se sabe eso de Descartes
de “pienso, luego existo”, y yo
pensaba bastante. En fin, que era sólo yo.
Mirándome
al espejo como me encontraba aquel domingo por la tarde, veía los adjetivos que
siempre he usado para describirme casi parpadeando sobre mi piel blaquecina.
Retraída, rechoncha, mediocre, en absoluto guapa, distraída.
Maldito
espejo. ¿Quién habría tenido la maquiavélica idea de ponerlo ahí? Mi madre,
seguro. Probablemente esperaba tener una hija que lo necesitara tan grande,
para poder seguir viéndose la cara repellada de maquillaje cuando se pusiera
tacones de treinta centímetros, y no una que lo necesitara más ancho que alto y
que nunca se separase de sus zapatillas de deporte. Tampoco le había preguntado
nunca por qué lo había puesto. Últimamente no hablaba mucho con mis padres.
-¿Se
puede saber qué haces ahí plantada?
Estuve
a punto de decirle que se marchara con mi tono más desagradable, pues pensaba
que era mi madre, pero en el último segundo comprendí que no era ella, sino Steph.
Por eso, únicamente le lancé una mirada de desaprobación a través del espejo.
-¿Cómo
has entrado? –le pregunté.
-Tu
madre me ha abierto la puerta –contestó, como si fuera lo más obvio del mundo;
y probablemente lo fuera-. Hablo yo más con ella de lo que lo haces tú.
-No
empecemos –aparté no sin esfuerzo mis ojos de la superficie reflectante para
mirarla de frente.
Por
cierto, Steph, cuyo nombre completo es Stephanie Mary Worth, era mi mejor
amiga. Básicamente también mi única amiga. En aquel momento me costaba
comprender cómo era posible que una preciosa chica de pelo kilométrico, ojos
más azules que el propio mar y que daba una patada a una piedra y encontraba
debajo cinco personas deseosas de ser sus amigas pudiera malgastar su tiempo
intentando hacerme salir de mi casa de vez en cuando y escuchando mis
tonterías. Ahora entiendo que los sentimientos, si son sinceros, no tienen nada
que ver con la belleza o la popularidad, sino que más bien dependen de cosas
inexplicables. Como lo que fuera aquello que Stephanie encontraba interesante
en mí.
-Vamos
a salir a dar una vuelta –me dijo Steph.
-No
me apetece –me dejé caer en un puf verde que me compraron un par de años atrás.
-Me
da igual –mi amiga tiró de mi mano intentando levantarme; pobre ilusa, no
podría conmigo por mucho que tirase-. No vamos a pasar el último día de
vacaciones encerradas.
-Tú
puedes salir cuando quieras –no la miré, porque sabía que estaba siendo
desagradable con ella.
-No
seas tonta, no voy a salir sin ti –vi de reojo cómo se cruzaba los brazos bajo
el pecho con determinación.
-Deberías
hacerlo. ¿No querías novio? Así seguro que los chicos se acercarían más a ti.
-Dicho
así parezco una desesperada –bufó Steph-. Yo quiero a alguien que me abrace y
me dé el cariño que tú no me das.
Alcé
los ojos y la miré. Estaba siendo injusta con ella, y una vez más le tocaba pagar
mi mal humor. Los últimos días de vacaciones siempre me ponían irascible,
sencillamente porque el empezar otra vez las clases significaba que tendría que
aguantar ver todas esas caras que se burlaban de mí cada vez que me miraban. O
al menos yo tenía la sensación de que lo hacían. Me recordé a mí misma que
Stephanie no tenía la culpa de ser tan guapa y encantadora, y agradecí que a su
lado yo fuera prácticamente invisible. Intenté esbozar una sonrisa y miré a mi
amiga.
-Está
bien –acabé accediendo-. Salgamos.
-¡Sí!
–hizo un gesto de victoria con el brazo y dio pequeños saltitos mientras me
levantaba.
-¿Pero
a dónde…?
Me
interrumpió antes de que pudiera terminar mi pregunta.
-Voy
a comprarme una cámara con el dinero que me han dado mis padres por Navidad.
¡Sí, una de las buenas! –se mostró explosivamente encantada- Y quería que tu me
ayudaras a escogerla. ¿Te acuerdas de todas las veces que decíamos que
queríamos una de esas cámaras? ¡Vamos a tenerla! También había pensado que
podríamos ir a ver ropa. Ya sé que es domingo, pero las tiendas están abiertas,
por las rebajas. Podríamos buscarte alguna falda o un vestido, harías muy feliz
a tu madre.
Ahí
la interrumpí con una mirada elocuente que ella comprendió.
-Te
ayudaré a elegir la cámara y te haré con ella todas las fotos que quieras. Te
llevaré la talla XS al probador si la S no te está bien, pero yo no voy a
comprarme nada, y menos faldas o vestidos. Ya parezco lo suficiente un tonel
sin ellos como para encima eso.
-Exageras
–me respondió Steph casi sin inmutarse, ya que me conocía de sobra y sabía
perfectamente cómo era yo.
-No
lo hago.
-Mírate.
Me
giró lentamente para que quedara de frente al espejo.
-No
sé cuántas veces voy a tener que decirte que ni estás gorda ni eres fea
–suspiró con auténtico pesar.
-No
se trata de lo que ves tú, sino de lo que veo yo.
-Pero
los demás ven lo que yo veo –insistió
Stephanie.
-¿Sabes
qué veo yo? Que me ha salido otro maldito grano en la frente –me aparté del
espejo.
Mi
amiga puso los ojos en blanco con exasperación.
-Acaba
de empezar el año. Vamos a empezar un nuevo trimestre en el instituto. Y dicen
que va a haber unos chicos nuevos en nuestra clase…
Iba
a continuar pero yo la interrumpí.
-¿Quién
te ha dicho eso? –alcé una ceja.
-Tengo
mis fuentes –respondió, altanera, en venganza por mi poca autoestima.
-Bah,
por mí como si quiere haber una vaca en mitad de la clase.
-Escúchame,
y te lo digo muy en serio –me miró con afectación-. Vamos a ir de compras,
porque lo digo yo.
No
habría aceptado si no hubiera sido por el entusiasmo que Steph tenía, y porque
no quería que se enfadara conmigo. De todos modos, por muchas cosas que me
probara, no me iba a gustar nada. Y menos faldas y vestidos. Me dio un
escalofrío sólo de pensarlo, y metí las manos en los bolsillos delanteros de
mis vaqueros.
-Como
quiera la señorita.
-Así
me gusta.
Cogió
mi mochila de la percha que había detrás de la puerta y me la tendió.
-Hala,
vamos –me abrió la puerta y espero gentilmente a que saliera de mi propio
cuarto.
-No
sé por qué te empeñas tanto en…
Me
cortó con una sonrisa misteriosa en los labios.
-Ya sabes lo que dicen de “año nuevo, vida nueva”. Pero no sabes
las sorpresas que te pueden esperar cuando volvamos al instituto…
[Este es el principio de mi nueva novela de Niall. Sé que es un poco diferente y quizás en un principio la personalidad de la protagonista os parezca menos atractiva que en los otros #Imagina's, pero lo que intento es darle un toque realista, porque pienso que todas las adolescentes nos sentimos así en algún determinado momento, o quizás durante toda esta etapa. Espero que este capítulo os haya resultado interesante, o al menos os dé la sensación de que los próximos pueden serlo, y os pido que leáis algo más antes de decidir si la novela os gusta o no. Por favor, comentad con vuestra opinión o en el blog o en menciones en twitter, acepto sugerencias y recomendaciones, y señalad en las casillas de abajo la opción que más se ajuste a vuestra opinión. Gracias<3
Ana.]
Juro, Ana, que me encantas.
ResponderEliminarPrimero que nada, quiero darte las gracias por hacer un #Imagina de este tipo, más que nada porque siempre son iguales; que si la chica perfecta, super guapa y demás. Eso, quieras que no, cansa y te hunde, porque yo por ejemplo, no soy de ese tipo. Y me siento igual que la protagonista de este #Imagina, por eso gracias.
Me ha encantado, creo que me vigilas porque prácticamente todo, es lo que hago yo y mis amigas. Bueno, que sepas que eres genial y que te quiero, teo.
ATTE: @Rachelforever99
PD: Lo sé, lo sé es demasiado corto mi comentario en comparación a otros, pero me adoras. A qué sí (ahora dices que no y quedo mal xd)
Jajajaja,no se lo que piensa el resto pero a mi la personalidad de la protagonista si que me parece atractiva eh!!! Jajajajaja ya no por si se parece a mi o bla bla bla (de hecho, mas bien no...) Pero esq me ha encantado es buenisimo XD me gusta su sentido del humor, aunque un poco negro Jajaja pero es gracioso :D l,ek que mas para mi... Y el principio.... jajaja geniall. Ya pensaba que era una stripper, jaja y un imagina asi no estaria mal eh que me dices ;) jajaajja. En fin que un primer cap perfecto, Ana. Sigue escribiendo guapa!
ResponderEliminarMe ha encantado este primer capitulo de este Imagina,de verdad Ana te juro que me encanta,me meto muchisimo en el papel porque yo constantemente me siento asi.
ResponderEliminarEspero con ansias el siguente capitulo
Besos:)
Ana me ha encantado el capítulo. Me tiene muy buena pinta, principalmente porque Niall es mi debilidad jejejeje. Y bueno, que me parece una idea genial lo de que la protagonista sea de esa manera en vez de la guapa que nada más conoce a uno de los chicos ya se enamoran de ella por su aspecto físico. Y eso del grano en la frente me ha llegado, yo siempre me estoy quejando de ellos jaja. Un beso.
ResponderEliminar-@havetofixit
SUBE YA!!!!!!!!!!!!!!!! Y si pudieras hacerlos mas largos major pero son perfectoa. Me encantas de verdad :) eres genial!!! Besoss
ResponderEliminarWooolas :3
ResponderEliminarPrimero--> Nueva lectora. Me enganché a tu blog y me leí todos los imaginas en... ¿tres tardes? sí, algo así.
Segundo--> Me encantó el capítulo, en serio, es perfecto.
Tercero--> Me encanta que la novela vaya a ser de Niall, porque es mi debilidad :$ Es decir, me encantan los cinco, obviously, pero bueno... creo que todas tenemos nuestra debilidad y la mía es Niall :)
Cuarto--> Sube cuando puedas, me gustó mucho y no puedo esperar para leer el siguiente :)
Besoos xx
ana me encanta esta novela porque aparecerá niall y ajaskjbhas y me parece más realista, más cercana a mí, sabes? besos guapi :)
ResponderEliminarHolaa, primero que nada leí tu primer cap y me gustó, espero que subas el segundo pronto <3<3 no soy fan de 1D pero me gusta la nove, en segunda yo igual tengo una nove, recien subí el capitulo 2 espero puedas pasar a leer, un beso!
ResponderEliminarOH MY GOSH. Aún me acuerdo de tu primer imagina de Niall que leí. Fue uno de tus imagina's de Niall los que hicieron que él fuera mi debilidad de los cinco, seriously. Me acuerdo que el primer imagina que leí en toda mi vida fue de Niall y fue tuyo y claro, asdfghjklñ. Bueno, no sé por qué te estoy explicando esto, but me ha salido solo, jajajaja!
ResponderEliminarEntonces, a lo que iba, que me encanta el primer capítulo y que espero que los otros sean igual de asdfghjklñ (aunque no lo dudo).
Un besito, guapi<3.
@thatisnialler
Holaaa aqui mecha ;)
ResponderEliminarMe encanto el capitulo, lo mas genial de tus novelas es que ninguna se parece, todas tienen un sentido diferente, y creo que eso es una de las cosas que nos atrae mas a las lectoras. En fin, me encanto el capitulo, espero que subas uno pronto :) xx
Ana, es la novela ideal para mi, con tan solo un capitulo me he identificado con la protagonista no se que tienen tus novelas pero ni los libros ni mierdas de esas TU! Solo tu consigues que me identifique me emocione y me meta en la novela hasta tal punto que aveces lo paso mal con todas me ha pasado y ahora encima de Niall q es mi debilidad a ver todos me gustan pero Niall... es mucho Niall bueno ana, q me enrollo que no dejes de escribir por favor q tu me alegras los dias solo tu ana. Besos xx
ResponderEliminarMe han encantado todos tus imaginas y estoy segura de que este tambien lo hara!! Me encanta la idea de que la protagonista sea una chica normal, para mi es muy facil identificarme con ella...sigue asi ana porque escribes genial
ResponderEliminarMe ha encantado! Es distinto a los demas, y la verdad me sientoidetificada con la chica, porquea mi no me va lo de llevar faldas y vestidos pero mi madre me dice y me regaña con que tengoue llevarlas para ser femenina y.. pues no, no pienso asi. En fin que me enrrollo xd me ha encantado, siguela cuando puedas!
ResponderEliminarMe gusta, me gusta.
ResponderEliminarLa verdad es que me ha parecido muy atractiva la forma en la que has empezado esta vez el imagina, llama más a querer seguir leyendo. También me gusta que esta vez hayas escrito en pasado, ya que acostumbras a escribir en presente. Lo lógico en un "imagina" es que para que esté más conectado a la realidad y con la persona que lee -que es la que trata de imaginar esa situación-, esté escrito en segunda persona y presente, pero por alguna razón me tira más que esté en pasado; quizá es porque siento curiosidad por saber que fue lo que pasó en esa historia ya escrita que por saber qué ocurrirá en esa historia que está por escribir. Sea por lo que sea, esta historia me está cautivando más que otras anteriores. Y dicho esto, voy a seguir con el capítulo dos.
ResponderEliminar