22 de diciembre.
Me
paso toda la mañana ordenando mi maleta: guardando la ropa en armarios y
cajones, colocando algunas de mis cosas en el baño, poniendo algunos libros que
me he traído en repisas… Al menos, acompaño la tarea con música, y se hace menos
pesada. Intento no cantar muy alto para que no se me oiga fuera, y en un
momento determinado me parece escuchar que tocan a la puerta y después alguien
trajina en el piso de abajo. Seguramente sea el técnico que tenía que venir a
reparar la conexión wi-fi. Cuando escucho que la puerta se cierra otra vez,
intento conectar mi teléfono a Internet y… ¡funciona! Empiezan a llegarme
whatsapps de todo el mundo, pero el primero que leo es uno de Jaime.
“Ayer no diste señales de
vida… ¿Todo bien? Se te echa de menos, fea”.
Sonrío
y le respondo.
“Lo siento, no funcionaba
el wi-fi… Sí, bueno, no va tan mal como esperaba. Yo también os echo mucho de
menos”.
Respondo
al resto de mensajes, que todos vienen a ser más o menos de lo mismo, y voy a
llamar a mi madre cuando tocan a la puerta. Dejo el móvil en la cama y abro. Me
encuentro con que quien ha tocado era Violet, que viene acompañada de un
pequeño gatito al que lleva en los brazos.
-¡Hola!
–me dice alegremente.
-Buenos
días –sonrío y me agacho para ponerme a su altura.
-¿Te
he presentado ya a Whiskers? –me pregunta con su infantil vocecilla.
-Pues
la verdad es que no –niego también con la cabeza.
La
pequeña realiza las presentaciones como si de dos personas se tratase, y me
asegura que le he caído bien al gatito.
-Así
que estás aquí, pequeñaja –Violet se vuelve al escuchar la voz de Zayn a sus
espaldas.
-Les
estaba presentando –se excusa, señalándonos a Whiskers y a mí.
Me
pongo de pie y miro a Zayn, que me saluda con una bonita sonrisa.
-Ya
te he dicho mil veces que si te vas a ir, me avises, que si no me asusto –le
riñe él.
-Perdón,
no lo volveré a hacer –se disculpa la niña, aunque estoy segura de que ambos
saben que eso pasará de nuevo.
-Estaba
jugando con sus muñecas en la mesa mientras yo preparaba el almuerzo, y de
repente ha desaparecido –me explica Zayn.
-Ah,
vaya… -entonces me doy cuenta de lo que ha dicho- ¿El almuerzo?
Miro
el reloj; son las una menos cuarto.
-¡Claro!
Y ya es tarde… -responde él, riendo- Lo que pasa es que tu padre me ha pedido
que no lo prepare a las doce como de costumbre, para que te vayas acostumbrando
a los horarios poco a poco.
-Dudo
que me llegue a acostumbrar a esto –suspiro.
-Vamos,
¡no es para tanto! –ríe de nuevo.
Violet
carraspea para que volvamos a dirigirle la atención a ella, a lo que Zayn me
mira con complicidad y coge a la pequeña por la cintura.
-¿Vamos
ya a comer, pequeñaja?
-¡Sí!
–responde ella, contenta.
-¿Vienes?
–Zayn me mira.
-Ah,
sí, claro –sonrío y bajo a almorzar con Violet y con él.
22 de diciembre; por la
tarde.
-Voy
a llevar a Violet a clases de baile –dice Zayn desde el otro lado de la
puerta-. En media hora estoy aquí, así que arréglate para entonces.
-Vale
–le contesto.
Estoy
tumbada en la cama de mi cuarto, leyendo y releyendo el último whatsapp que me
ha enviado Jaime.
“No hemos tenido tiempo de
hablar de lo que pasó la noche antes de que te fueras y… no sé, me gustaría que
lo hiciéramos… Me gustaría saber qué significó para ti y eso…”
No
tengo ni idea de qué contestarle. La verdad es que no he tenido tiempo de
pararme a pensarlo. Bueno, miento. Tuve más de dos horas de viaje en avión para
hacerlo, así que quizás es que no me haya atrevido a pensarlo. Pero el caso es
que no tengo muy claros mis sentimientos hacia mi amigo. No quiero confundir
amistad con amor y hacerle daño. Quiero tener las cosas claras antes de darle
una respuesta.
Suspiro
y apago el móvil. Soy consciente de que le aparecerá que lo he leído y no le he
contestado, pero ahora mismo no puedo pararme a recapacitar, tengo que estar
lista para cuando Zayn llegue.
Me
levanto y miro el interior del armario, dubitativa. Tampoco es que sea tan
difícil coger algo y simplemente ponérmelo, pero en ese momento nada de lo que
veo me convence. Rebusco por entre la ropa y suspiro. Al final me decido por
unos vaqueros, un jersey de lana beige que me llega por las rodillas y unas
botas del mismo color. Saco del cajón una bufanda escarlata y un gorrito a
conjunto, y me miro al espejo de pie que hay en la pared. Bueno, tampoco estoy tan
mal. Y frío no creo que vaya a pasar, aunque en Londres en diciembre dicen que
el tiempo es gélido.
No
soy de las que se suela maquillar, pero me pongo rímel en los ojos para darles
un aspecto algo más grande. Cojo mi móvil y un billete de veinte libras y
guardo ambas cosas en el bolsillo de mis vaqueros.
Zayn
debe estar aquí en unos diez minutos, y se me ocurre que podría llamar a mi
madre, pero a estas horas aún estará trabajando, así que descarto la idea.
Salgo de mi cuarto y bajo tranquilamente por las grandes escaleras. Es una casa
enorme de la cual aún no he visto casi nada, sólo mi cuarto, el baño, la cocina
y el salón, aunque tampoco es que haya tenido demasiado tiempo. Camino por uno
de los pasillos y entro en una habitación al azar. Descubro que es una
biblioteca, con las paredes cubiertas por estanterías llenas de toda clase de
libros, y un par de mesas con sus sillas en el centro de la sala. Veo que una
de las estanterías del fondo está dedicada exclusivamente a todos los números
de las revistas que dirige Marga, y pienso que debe de ser muy exitosa para que
mi padre y su nueva familia tengan tanto dinero.
Salgo
de la biblioteca y me encuentro a Zayn sentado en el primer escalón de la gran
escalera. Al verme aparecer, sonríe.
-Ya
pensaba que te habías ido sin mí.
-Pues
ya me dirás a dónde…
-Cierto.
Se
levanta y señala la puerta.
-¿Nos
vamos?
Asiento
con la cabeza. Le observo mientras camina delante de mí. Se ha puesto unos
pantalones azules, una camiseta blanca y una chaqueta vaquera que le quedan
realmente bien.
-¿No
vas a pasar frío? –pregunto, al salir de la casa y notar el aire fresco en la
cara.
-No,
aquí estamos acostumbrados a estas temperaturas –se encoge de hombros.
-Ah.
Un
taxi nos espera fuera, y Zayn me sostiene gentilmente la puerta del coche para
que pase. Cuando entra, no dice nada al taxista, pero éste se pone en marcha. Me
llama la atención ver que es la misma persona que me recogió del aeropuerto, o
eso me parece.
-¿A
dónde vamos?
-No
sería interesante si te lo dijera… -ladea la cabeza.
-Pues
a mí no me gustan las sorpresas –bufo.
-¡¿Por
qué?! –se asombra- ¡Pero si las sorpresas son lo mejor que hay en el mundo!
-Para
mí no. Estoy harta de que pasen las cosas sin enterarme de que están
ocurriendo. Primero mis padres se divorcian de repente, luego resulta que mi
padre se casa y yo no tenía ni idea de eso hasta unos días antes de la boda,
ahora he tenido que venir aquí sabiéndolo casi sin antelación… Me gustaría poder
planificar un poco más las cosas que pasan en mi vida –suelto.
Me
resulta extraño haberme sincerado de esa forma con Zayn, y nada más terminar,
me arrepiento de habérselo dicho. Casi no le conozco, y no debería contarle mis
sentimientos.
-Bueno,
pero… también hay sorpresas buenas –sonríe-. Y quién sabe si no vas a acabar
agradeciendo haber venido estas vacaciones aquí.
-Lo
dudo.
-¡Abre
los ojos! ¡Estás en Londres! ¡Vas a vivir casi un mes en una mansión! Tienes
una oportunidad que mucha gente querría tener –me mira-. Además, compartes casa
con uno de los hombres más deseados de la ciudad –sonríe entre divertido y
prepotente.
Pongo
los ojos en blanco y contengo una sonrisa.
-No
sabía que mi padre estuviera tan solicitado… -alzo las cejas.
-Me
refería a mí –se cruza de brazos.
-¿A
ti? ¡Pero si en mi casa sólo hay un hombre! Y ese es mi padre, claro.
Zayn
suspira, no sé si fingiéndose molesto o disgustado de verdad.
-Qué
simpática –ironiza.
-Qué
modesto –digo con el mismo tono.
-¿Ya
se te ha olvidado lo de tratar bien a la gente y eso?
-Los
prepotentes no merecen mi respeto –digo, haciéndome la altiva.
-No
finjas, sé que en realidad es por mis tatuajes –ladea una sonrisa y yo no puedo
evitar reír.
-¿Por
tus tatuajes? ¿Qué tengo yo en contra de tus tatuajes?
-¡Ajá!
–sonríe ahora abiertamente.
-¿Ajá, qué? –frunzo el ceño.
-Que
acabas de admitir que te gustan mis tatuajes –dice, triunfal.
-¡Yo
no he dicho eso! –protesto.
-Vale,
has dicho que no tienes nada en contra de ellos, luego… te gustan. Te parecen sexys.
¡Admítelo!
Sin
quererlo, me sonrojo. ¡Maldito rubor! Pero no, no pienso admitir que sí, que
sus tatuajes son bastante atractivos, no voy a darle la razón aunque la tenga.
Ni aunque el color de mi rostro ya me haya delatado.
-¿Ves?
Lo que yo decía –me guiña un ojo.
-Yo
no he admitido que tus tatuajes sean sexys.
-Tu
cara lo dice todo –se encoge de hombros, riendo.
-Las
apariencias engañan.
-Cierto,
tú intentas fingir que no te parezco atractivo cuando en realidad sí que te lo
parezco –sonríe mordiéndose la lengua, y yo me pongo aún más colorada.
-¡Dios
mío, dame paciencia… porque como me des fuerza le pego! –digo mirando al cielo.
-¿Qué
has dicho? –arruga la nariz.
-¿Qué?
–ladeo la cabeza.
-Acabas
de decir algo en español… Seguro que era reconociendo que…
-No,
no era eso –le interrumpo, y justo entonces el taxi se para-. Le estaba
pidiendo a Dios que llegáramos ya a dónde sea que vayamos, y ¡mira! Me ha
escuchado.
-Ya,
claro –contesta, sarcástico.
Yo
sonrío. Es gracioso que no pueda entenderme cuando digo cosas en español.
Aunque lo que he dicho en el coche me ha salido solo. Supongo que por mucho que
me guste el inglés, de forma natural me sale hablar en español.
Zayn
sale del coche y me invita a que yo también lo haga.
-¿Pero
no le pagamos? –pregunto, mirando al taxista.
El
taxista sonríe, y Zayn me lo explica.
-No
es un taxi cualquiera, my darling. Él
trabaja para tu padre (y Marga, claro). Le pagan un sueldo mensual, y él nos
lleva a donde necesitemos. Es como una especie de chófer pero que en vez de un
coche normal tiene un taxi. Es raro, sí, pero es que en algunas partes de
Londres los coches particulares tienen que pagar un impuesto especial por
circular, y los taxis no –sonríe.
-Así
que mi padre también busca lo más barato… Eso es algo que aún conserva de
cuando vivía con nosotras y no éramos ricos, supongo –suspiro.
-Bueno,
las fortunas no se hacen de derrochar el dinero.
Se
encoge sólo de un hombro, y yo rompo a reír.
-¿Qué
pasa?
-Nada,
es que… -sigo riendo- Es que has hecho un gesto muy gracioso.
-Prefiero
no saber cuál –ríe levemente-. Bueno, pues aquí estamos.
Hace
un gesto con su brazo abarcando todo nuestro alrededor, y por primera vez me
fijo en dónde estamos. Nos encontramos justo enfrente de unos grandes arcos
sostenidos por una serie de blancas columnas jónicas que dan entrada a lo que
parece un extenso parque.
-¿Esto
es…?
-Hyde
Park, sí –sonríe.
-Vaya.
-¿Qué?
Veo
con el rabillo del ojo -pues yo estoy ensimismada observando el paisaje que
tengo ante mí- que Zayn me mira.
-No
sé, esto es… imponente.
-Ya
te dije que quizás no era tan malo eso de venir a Londres. Hay cosas preciosas
en esta ciudad.
-Ya
lo creo –respondo, aún asombrada.
-Pues
espera a verlo por dentro, porque esto es sólo la entrada… Aunque se le llama
la Grand Entrance, y tiene su propia belleza. Es tan grande porque se construyó
para que por ella pasaran carruajes, creo que en el siglo XIX –me explica.
-¿Así
que sabes historia? –le miro.
-Bueno,
si voy a hacerte de guía turístico, tendré que informarme de algo para
contarte.
-Nadie
ha dicho que vayamos a hacer turismo –no creo que se haya molestado en aprender
cosas sobre Londres para decírmelas a mí.
-Ya
que salimos, es una buena oportunidad para que veas algunas cosas de la ciudad –sonríe.
Sin
decirme nada, Zayn empieza a caminar, y yo le sigo. Atravesamos los grandes
arcos y nos desviamos un poco a la derecha. Me doy cuenta de que estamos
andando en dirección a un grupo de chicos y chicas jóvenes, más o menos de
nuestra edad.
-¿Ésos
son tus amigos? –pregunto, ahora un poco nerviosa.
-Sí
–responde-. Tú trátales como a Violet y ya está. O si no, imagínatelos desnudos…
Conmigo ya no tendrás que esforzarte, ya te has encargado de echar un ojo esta
mañana –ríe, y yo me sonrojo.
-No
fue a posta –me quejo.
-Yo
también me espiaría, tranquila, entiendo que soy irresistible.
-Imbécil
–bufo.
Cuando
estamos lo suficientemente cerca, puedo distinguir que hay cuatro chicos y
cinco chicas. Sin embargo, una sexta joven –que no sé de dónde sale-, se cruza
en nuestro camino, entrelaza sus manos en el cuello de Zayn, y le estampa un
apasionado y prolongado beso en los labios ante mi atónita mirada.
[Espero que os haya gustado. Por favor, mencionadme en twitter o comentad con vuestra opinión, y marcad en las casillas de abajo la opción que más se asemeje a lo que os ha parecido el #Imagina, ES MUY IMPORTANTE, gracias.]
5 chicos y 6 chicas?? No me dan las cuentas! Quiero ver como resuelves esto, seguro que de la forma mas inesperada, como siempre :) Gran escritora, gran fan.
ResponderEliminarDios, me muero! cuando subes el proximo capitulo? no puedo esperar :)x
ResponderEliminarMe encanta, de verdad. No me esperaba para nada el final. Fue como ......................................... GOD.
ResponderEliminarSabía yo que la espera iba a valer la pena, y no me equivocaba.
Me encanta la relación de Zayn-rayita. Es genial.
No tardes en subir, por favor.
Un beso :D
No Dejes A tus Fans Con Ganas De Seguir Leyendo!!
ResponderEliminarSoy Tu Fanatica Giirl! I Am A Smokingsmiler♥
OH MY GOOOOOOD! Me corro con el cap*______* Es perfecto asdfgjgkdfw._.
ResponderEliminarSiguela pronto, es una orden..... te estare vigilando.... JAJAJAJA okya. Ya enserio, sube cap pronto porque sino morire :( te amo a ti y a la novela♥
Ana!
ResponderEliminarComo que Zayn tiene novia?! Noo, tiene que estar con (TN)
Siguela guapa
Violeta Horan
LOL LOL LOL LOL me hace gracia Zayn con su novia y ___ con Jaime LOLOLOLOL
ResponderEliminarREAL MRS. HORAN
P-E-R-F-E-C-T-O sube en cuanto puedas por favor que estoy deseando saber como sigue :)))
ResponderEliminarME ENCANTA!!!!! SIGUEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEELOOO
ResponderEliminarPor que tanta perfeccion en una pagina? :o me encanta , en serio, un beseeet
ResponderEliminar¿Cin-cinco chicos y se-seis chicas? ¿Pero cómo...? ¿Pero qué...? Tendrás que explicarlo pero que MUY BIEN en el próximo capítulo que por supuesto, pienso que sea pronto y largo e igual de increíble que este :) Amo tu escritura.
ResponderEliminarRachel xX
NECESITO EL CAPITULO 6 ¡¡¡¡ ME ENCANTA TIENES QUE SEGUIRLA Y PORFAVOR TODAS LAS DIRECTIONERS QUE TENGAIS TWITTER PODEIS AYUDARNOS PARA CONSEGIR QUE VENGAN A VALENCIA ¡¡¡ #ValenciaWantsWhereWeAreTour AQUI OS DEJO EL HASTACK ¡¡¡
ResponderEliminarGRACIAS ¡¡¡
Cuando subes capitulo nuevo??? :)
ResponderEliminarCuando subiras la proxima parte es genial este imagina estoy enganchada a tus historias
ResponderEliminar