22 de diciembre.
Me
despierto sin saber muy bien dónde estoy. Poco a poco, voy recordando que he
viajado hasta Inglaterra y que ahora estoy en la casa de mi padre. Para estar
en una cama que no es la mía, no he pasado tan mala noche. Quizás sea porque la
cama era el doble de grande que la mía, y eso no está nada mal. Se me ocurre
que debería llamar a mamá para contarle algunas cosas. Ayer hablé con ella sólo
unos minutos, porque en España es una hora más que aquí, y sé que ella estaba
cansada. Seguramente tuvo un duro día en el trabajo, mucha presión con el
contrato que están cerrando ahora. Si me paro a pensarlo, mi madre está en una
situación bastante peor que la mía. Se va a pasar las vacaciones trabajando y
encima sola. Incluso el día de Navidad o Nochevieja. Definitivamente, debería
llamarla. A las una, que en España serán las dos y tendrá descanso para el
almuerzo, la llamaré.
Miro
el reloj de la mesita de noche. Son las diez, ya va siendo hora de levantarse.
Me quito el pijama y rebusco entre la maleta hasta que encuentro un calentito
jersey gris que hace las veces de vestido y unos leggings que me cubren también
de rodilla para abajo. Esta, como todas las casas Inglesas, tienen moqueta, así
que no necesito ponerme zapatos, iré en calcetines a todas partes. Me pongo la
ropa y dejo el pijama en la cama. Esa maleta necesita que la ordene
urgentemente, pero primero quiero desayunar algo. Tengo un hambre…
Antes
de bajar a la cocina, me dirijo hacia el baño que se encuentra en el pasillo
para hacer pis y lavarme la cara. Abro la puerta del baño y…
-¡¡¡¡AAAAAAAAAAAAAAAAAAAAH!!!!
–grito.
Justo
delante de mí está Zayn… ¡totalmente desnudo! Al verlo, me tapo la cara con las
manos, pero la imagen de su moreno cuerpo al descubierto, perfectamente tonificado
y mojado sigue en mi retina. Ayer, con la ropa puesta, no imaginé que fuera a
estar tan bien. Pero es que… ¡guau! Mi respiración se vuelve entrecortada. Mi
cara adquiere el color de un tomate al pensar en que acabo de ver su… bueno, su
pequeño amigo.
No
sé muy bien por qué no me voy del baño en lugar de quedarme allí con las manos
tapándome la cara, y me extraña aún más escuchar una risa, su risa.
-Ya
está, ya puedes mirar otra vez, me he puesto una toalla –dice.
Separo
un poco dos de mis dedos para mirar a través de ellos. Sí, algo blanco le cubre
desde la cintura hasta las rodillas. Me llevo las manos a los muslos, y me los
froto, nerviosa.
-Lo…
lo siento –no me atrevo a mirarlo a la cara.
-Bah,
tranquila. Sé que ayer te picó la curiosidad cuando te pregunté si me habías
imaginado desnudo… y no has podido resistir la tentación de venir a echar una
ojeada –ríe de nuevo.
-¡Imbécil!
¡Pues claro que no! Creía que no había nadie aquí dentro…
-Ya,
y el sonido de la ducha de hace dos minutos tampoco lo has oído, ¿no?
-¡No!
Además, ¡¿qué haces tú duchándote en el cuarto de baño de mi casa?!
-Ahora
sí es tu casa, pero ayer odiabas la
idea de quedarte aquí…
-Vale,
¿qué haces duchándote en el cuarto de baño de la casa de mi padre?
-Vivo
aquí, ¿recuerdas?
-Pero…
-la verdad es que no pensaba que viviera allí.
-Si
no, ¿cómo crees que puedo cuidar de Violet?
-Pues…
no sé, teniendo un horario de trabajo y esas cosas…
-Se
me costea quedarme aquí, y tu padre y Marga también lo prefieren. Todos
contentos… menos tú.
-Yo
no he dicho que tenga nada en contra de que te quedes aquí.
-¿Entonces?
-¡Joder,
acabo de verte desnudo! –digo, fuera de mis casillas.
-Pues
a partir de ahora, toca a la puerta antes de entrar al baño –responde
alegremente.
-¿Y
te da igual? –pregunto, desconcertada.
-¿El
qué?
-¡Que
la reina tenga ochenta y siete años, no te digo! Que te haya visto… sin ropa.
-Qué
irónica, chica. Bueno, si lo prefieres, puedo exigirte verte yo a ti también…
Sería lo justo –suelta una carcajada.
-¡Dios,
qué capullo!
Sin
poder evitarlo, me vuelvo a sonrojar.
-Es
broma, es broma. No creo que hayas visto nada que no hubieras visto ya.
En
realidad… En fin, no es que nunca haya visto las partes íntimas de un hombre,
pero estoy mucho menos familiarizada con ver a tíos desnudos de lo que Zayn
seguramente cree.
-Claro
que no –bufo.
-Entonces,
¿cuál es el problema? A mí no me importa, a ti no te importa… Podremos
superarlo –bromea.
Suspiro,
y me atrevo por fin a mirarlo a la cara. ¡D-I-O-S! ¡¿Pero cómo…?! ¡¿Cómo puede
ser tan guapo?! Tiene el pelo mojado, y el flequillo descansa en su frente.
Además, pequeñas gotitas de agua resbalan por su piel, haciéndola brillar.
Tiene una sonrisa divertida en los labios, todo esto le hace gracia. Llevo
disimuladamente los ojos a su torso y, aparte de fijarme en sus músculos, me
doy cuenta de que tiene bastantes tatuajes, tanto en el pecho como en los
brazos. De hecho, el antebrazo derecho lo tiene totalmente cubierto por estos
grabados. Eso tampoco lo vi ayer, cuando el jersey lo tapaba todo.
-Vaya,
a ti te gustan bastante los tatuajes, ¿no? –apunto.
-¿No
se nota? –alza las cejas.
-Claro
que se nota, era simplemente un comentario. Y luego dices que la borde soy yo.
-Tienes
razón, seré más simpático- pone una sonrisa exagerada-. Sí, me encantan los
tatuajes, y todos los que llevo significan algo especial.
-Pues
sí que tienes tú cosas especiales –digo.
-Sólo
34 –ladea una sonrisa.
-Ah,
pocos –ironizo.
-Bueno,
a las chicas os gustan más los tíos con tatuajes, ¿no? –me mira con descaro.
-No
siempre –me encojo de hombros.
-Qué
lástima –suspira.
-Sí,
has reducido tus posibilidades en el mundo femenino. Ahora quedas descartado
para las chicas a las que no les gusten los tatuajes… -ladeo la cabeza.
-Y
a ti, ¿te gustan? –clava sus ojos en mí.
Aparto
la mirada, incapaz de mantenérsela a esos ojos marrones que me miran tan
intensamente.
-Depende
de si la persona que los lleva me gusta o no –murmuro.
-O
sea, que no quedo del todo descartado, ¿no? –ríe.
-Con
tanta preguntita… no sé yo.
Justo
en ese momento pienso en Jaime, en el beso que me dio la noche antes de que me
fuera… ¿Qué estoy haciendo en la misma habitación que otro chico que, por
cierto, ¡está desnudo!? Bueno, sí, tiene una toalla por encima, y técnicamente
no estoy en la misma habitación porque estoy justo en la puerta y él está en el
baño, pero… no sé, no creo que esto esté bien, y menos con el carácter que está
tomando la conversación y las intensas miradas de Zayn.
-Bueno
yo… mejor me voy que querrás vestirte y eso. Ya vendré cuando salgas tú –digo.
-Podemos
compartir el baño… -ríe con picardía.
-No
gracias, prefiero esperar.
-En
fin, lo que quieras.
Ya
que voy a cerrar la puerta, escucho que Zayn me dice:
-Por
cierto, me encanta tu pelo.
Me
miro fugazmente en el espejo del baño y veo que estoy despeinada; me parezco
bastante a Simba, el del Rey León. Pongo los ojos en blanco.
-Acabo
de levantarme, ¿te crees que el pelo una se lo quita para dormir y luego se lo
pone por la mañana?
-Era
sólo una apreciación –sonríe angelicalmente.
-Ya,
claro –salgo y cierro la puerta tras de mí-. ¡Sal rápido, no sea que Violet se
despierte y se asuste al verme con estas pintas! –digo desde fuera.
-Ay
que ver, cómo lo exageras todo –me contesta-. Mientras esperas, puedes ir
pensando en si vas a venir esta tarde a conocer a mis amigos.
¡Es
verdad! Ya se me había olvidado que me había propuesto salir un rato. Por un
lado podría estar bien, pero por otro… no es que Zayn me caiga mal, pero me
pone muy nerviosa con las cosas que dice a veces. Claro que la idea de quedarme
sola en esa casa toda la tarde… Puede que muera de aburrimiento.
Un
par de minutos más tarde, Zayn sale del baño ya vestido con un jersey marrón y
unos pantalones vaqueros. Me sonríe.
-Mira,
ahora parece que no tuviera ni un tatuaje… Con lo cual, te gusten o no te
gusten los tatuajes… es posible que yo te llegue a gustar –me guiña un ojo y
señala el baño-. Todo suyo, my darling.
Suelto
una risilla y entro en el baño para arreglarme. Me vuelvo a mirar al espejo. La
verdad es que llevo unos pelos…
Diez
minutos después, estoy bajando las escaleras en dirección a la cocina. Justo al
entrar en ella, me suena la barriga.
-Vaya,
¿tenemos hambre? –escucho que dice Zayn.
-¿Es
que estás en todas partes o qué? –me sorprendo.
-No,
sólo en las que estás tú –ladea de nuevo una sonrisa.
-Ah,
qué tierno.
-Sí,
me ha quedado bastante bien.
Ambos
reímos, y me sorprendo bastante de que eso esté ocurriendo.
-En
realidad es que, al ser por la mañana, lo lógico es ir al baño y desayunar,
¿no? Así que tampoco es tan raro que coincidamos –dice él.
-Tienes
razón.
Zayn
se lleva las manos a la cabeza, como asombrado.
-¿Qué
has dicho?
-Que…
que tienes razón –frunzo el ceño.
-¡No,
no, espera! –saca su móvil del bolsillo del vaquero.
-¿Qué
pasa?
-¡Tengo
que grabar este momento histórico! –dice, riéndose-. ¡Me has dado la razón! Y
¿quién sabe cuándo se volverá a repetir esto?
-Tonto
–bufo, pero luego se me escapa una sonrisa.
Entonces
recuerdo algo…
18 de octubre.
-Se
te ha caído…
-¿El
qué? –miro al suelo.
Jaime
me da con su dedo índice en la barbilla.
-¡Has
picado! –ríe.
-Tonto
–protesto.
-Lista
–me contesta él con una sonrisa.
El
resto de nuestros amigos ríen, y veo alguna que otra mirada cómplice. Un rato
después, Lorena se acerca a mí y me susurra:
-Cuando
el río suena, agua lleva…
-¿Qué
dices? –arrugo la nariz, sin entender por qué me ha dicho ese refrán.
-Pues
que cuando un tío una tía se dicen “tonto” y todo eso… es que hay algo entre
ellos –me guiña un ojo.
Yo
sonrío quitándole importancia. ¿De verdad hay algo entre nosotros? Bueno, ¿y si
lo hubiera? La verdad es que no me desagrada la idea.
21 de diciembre… de nuevo.
-¿Hola?
¿Hoooooola? –Zayn me pasa la mano por los ojos para que reaccione.
-¿Eh?
¿Qué? –sacudo la cabeza para espabilarme; me había perdido en los recuerdos.
-Estabas
como ida –alza las cejas.
-Estaba
pensando –sonrío.
-Ah
–no me pregunta nada más.
Zayn
empieza a sacar cosas del frigorífico y los armarios y se pone a preparar
desayuno como para dos.
-No
hace falta que me prepares el desayuno –le digo.
-Trabajo
aquí, ¿recuerdas? Tengo ciertas obligaciones –sonríe.
-Bueno,
lo que quieras…
-¿Leche
o café? –pregunta mientras trajina con las cosas.
-¿Chocolate?
–sé que allí el Cola-Cao no existe, así que busco lo más parecido.
-Es
exigente la señorita, eh –bromea.
-Te
he dicho que me lo preparaba yo –contesto.
-Ni
siquiera sabes dónde está cada cosa… No quiero que desaproveches la juventud
preparando un desayuno –ríe por lo bajo.
-Estoy
de acuerdo.
-¿Chocolate caliente o templado?
-¿Chocolate caliente o templado?
-Caliente,
por favor.
-Marchando
–imita a un camarero.
Me
apoyo en la mesa de la cocina mientras contemplo cómo prepara las cosas. Se
nota que tiene muy buen cuerpo a pesar del jersey ancho; probablemente el hecho
de que ya lo haya visto me ayuda a pensar eso.
-¿Has
pensado ya en lo de esta tarde? –se detiene y me mira.
-Bueno…
-¿Sí
o no?
-Sí
–acepto finalmente.
-Genial
–sonríe mordiéndose la lengua, como le he visto hacer ya alguna vez; qué gesto
más encantador.
Vuelvo
a pensar en lo que me dijo Lorena hace ya tiempo. Pero eso no tiene por qué ser
verdad, ¿no? Quiero decir… no tiene nada que ver que yo le haya dicho tonto a Zayn con que me guste o algo
así… ¿verdad?
[Espero que os haya gustado. Por favor, mencionadme en twitter o comentad con vuestra opinión, y marcad en las casillas de abajo la opción que más se asemeje a lo que os ha parecido el #Imagina, ES MUY IMPORTANTE, gracias.]
ME ENCANTA ASDFGHJKL escribes geniak en serio! Sigue porfa! ;D
ResponderEliminarHermosa, muero cada vez que zayn dice my darling jajaja me encanta!! Siguiente!!:)
ResponderEliminarsiguiente!!!! porfavor!! me encanta... no me hagas esperar tanto!!!! la curiosidad me mata!!! jaja :D
ResponderEliminarSIN PALABRAS¡¡¡¡ deseando el capitulo 4 :) ¡¡¡¡¡¡¡¡
ResponderEliminarDioooos lo amoo asdgsjfmfkkdf, no nos hagas esperar tanto porfavor :c
ResponderEliminarCuando lo del cuarto de baño es...asfljnlksdjfnalsidf. Aunque...¿cómo es que ves a zayn y ni siquiera le das un beso? ¿en la historia no es famoso?. Bueno, lo de tonto, idiota y eso un poquito visto. Pero sólo por lo de sayn desnudo kjadfknsdfj...jajaj me gusta la historia, no dejes de escribir¡
ResponderEliminarOMG! OMG! OMG! Muero, de verdad, M-E E-N-C-A-N-T-A Eres una escritora de Novel jajaja. Zayn, desnudo, en el baño, con el pelo mojado y gotas cayendole por la cara....fsdkacvbdsaf fcdn cvdsvdskfd ¿entiendes? Mueres como no sigas jajaaj <3<3<3<3
ResponderEliminarCuando vas a subir la proxima parte me muero por seguir leyendo!!
ResponderEliminarZayn desnudo en el baño bbagwuddhdidnjaksbdyghhduduagsaxuao