EN UN INSTANTE - Capítulo 8

[Pulsad cuando ponga "comenzó a rasgar la guitarra" y os llevará hasta una canción para que escuchéis, disfrutad del capítulo]

Si os paráis a pensarlo, un estudio de grabación tampoco es nada tan espectacular. Quiero decir, cuando pensamos en uno nos imaginamos a los cantantes famosos detrás del cristal, con un vaso de café de Starbucks en la mano y grabando apasionadamente sus canciones. Bueno, tal vez no os imaginéis eso, pero en cualquier caso, la palabra estudio nos puede hacer pensar en algo estiloso. Y en realidad esto no es necesariamente así. De hecho, yo estaba en un estudio de grabación esa tarde y al mirar a mi alrededor vi a Zayn saliendo del baño –acompañándonos con la banda sonora de la cisterna del váter-, a Liam dándole golpecitos distraídamente con el dedo índice al platillo de una batería, y a Louis y Harry devorando sendos sándwiches cuyo contenido desconocía, pero de los que asomaba algo verde que parecía lechuga. Así que, en ese contexto, la mesa de mezclas no impresionaba tanto.

En cualquier caso, la situación me resultó bastante cómoda, y de un humor extrañamente plácido, sonreí. Capté con el rabillo del ojo cómo Steph alzaba las cejas ante mi gesto, pero fue un alzamiento de cejas sorprendido, no escéptico, por lo que me limité a seguir sonriendo. En realidad, no sé si me miró así por la sonrisa o porque me hubiera visto salir del pequeño cuarto acompañada de Niall, pero no me cabe duda de que ambas cosas debieron sorprenderla.

-A ver –dijo Louis con la boca llena.

Zayn le dio un codazo en las costillas.

-¡Calla y traga ya! –le apremió.

Louis compuso cara de pocos amigos, pero obedeció y se comió todo su bocadillo antes de volver a hablar. Al vernos a todos reunidos al otro lado del cristal, Liam salió a nuestro encuentro.

-¡Ya era hora! –protestó- Me ha dado tiempo a aprender a tocar la batería mientras esperaba.

-Yo no llamaría a esto –Harry imitó los toquecitos con el dedo que su amigo había estado dando al platillo- aprender a tocar la batería.

-Tú limítate a cantar, que es de lo único que entiendes –se defendió Liam con despecho.

-Por cierto, Niall, no pienses que no te hemos visto salir de ahí acompañado de la dama –habló Louis después de tragarse el último bocado.

Deseé que no hubiera dicho nada, porque todas las miradas se clavaron en nosotros. Diez ojos fijos en mí eran demasiados, más de los que estaba acostumbrada a soportar, cinco veces más, de hecho, y me empezaron a sudar las manos.

-¿Envidia, Tomlinson? –contestó Niall.

Por algún motivo, tuve la sensación de que lo dijo irónicamente. Ahora, conociendo a Niall, no creo que fuera así, él no es esa clase de persona. Pero en aquel momento, yo siempre sentía que todo era irónico, que cualquier comentario beneficioso para mi persona tenía que tener algo escondido, un lado oscuro de burla permanente. De modo que bajé la vista y me mordí la cara interna de la mejilla, para no exteriorizar mi nerviosismo.

-Mentiría si dijera que…

-Bueno, bueno, ¿no íbais a cantar?

Steph interrumpió a Louis descaradamente. Bueno, descaradamente habría sido si lo hubiera interrumpido antes de que empezara a hablar. Lo que ella hizo fue callarlo, evitar lo que pudiera decir. Quizás Steph pensaba que iba a decir que mentiría si dijera que sí, y quería evitar que yo tuviera que escuchar eso, para intentar proteger mi autoestima o algo así. Lo cierto es que de todos modos yo pensaba que iba a decir algo así, para no variar, y a pesar del intento de mi amiga, la sonrisa se me borró de la cara durante un rato. Sin embargo, en realidad no sé qué era aquello que Louis iba a decir…

-Sí, vamos a ello –Liam hizo gestos para que nos pusiéramos en movimiento.

-¿Habéis estado alguna vez en un estudio? –nos preguntó Zayn.

Steph negó con la cabeza. Yo ni siquiera me molesté en ello.

-Pues ésa es la mesa de mezclas –señaló a la especie de mesa en la que había diversos indicadores, botones, medidores y pantallas.

-Zayn, una cosa es no haber estado nunca en un estudio y otra es que no sepamos ciertas obviedades –Steph puso los ojos en blanco, pero habló claramente en broma.

-Vale, vale, disculpa –él sonrió y continuó con su guía por el piso.

Entre todos, estuvieron un rato explicándonos lo que era cada cosa. Era Liam el que más sabía de todo aquello, y era el que nos contaba las particularidades, pero se notaba que los cinco estaban familiarizados con los estudios de grabación, y eso sólo podía significar que habían estado bastantes veces en uno, lo que confirmó mi creencia de que iban en serio con esto de la música.

Cuando terminaron la visita turística, mi humor había mejorado un poco. No estaba tocando las castañuelas, pero me sentía más a gusto otra vez.

-Vamos al lío –Louis se frotó las manos.

-¿Vais a grabar una canción? –preguntó Steph.

-Vamos a cantar algo, y lo grabaremos por si resulta que queda maravillosamente –Niall se encogió de hombros-. Pero esto es más que nada por ensayar y por que lo escuchéis.

Las dos asentimos con la cabeza, y los chicos nos dijeron que nos sentáramos en unas sillas –muy cómodas, he de admitirlo- que había junto a la mesa de mezclas. Niall sacó dos auriculares bastante grandes que conectó a alguna de las clavijas que había por ahí, y no me pasó por alto el hecho de que, si bien a Steph se los dio en mano, a mí me ayudó a colocármelos. Me pareció algo sin sentido, porque es obvio que eso no tiene ninguna dificultad, pero por un momento me inundó el olor de su piel y el corazón empezó a latirme a toda prisa.

Los chicos traspasaron la puerta que separaba la gran sala de detrás del cristal de la nuestra y empezaron a hacer sonidos extraños que imaginé que les servían para calentar la voz. Steph me miró con diversión, y yo acabé por esbozar un amago de sonrisa. Mientras tanto, observé que Niall cogía una de las guitarras acústicas y se la colgaba del cuello. Parecerá absurdo, pero me sentía como si estuviera tras un cristal policial y ellos no pudieran vernos mirarlos, así que es probable que me quedara embobada con Niall en algún momento. No lo recuerdo, y me alegro de no recordarlo.

Cuando ellos consideraron que ya tenían la voz preparada, nos hicieron unos gestos para que les prestáramos atención –ah, como si estuviéramos haciendo otra cosa-, y Niall comenzó a rasgar la guitarra. Quizás no debería decir rasgar, porque eso suena a doloroso. Más bien parecía que la estuviera rozando, y en lugar de arrancarles sonidos a las cuerdas, la música saliera de toda la guitarra, de todo él.

Antes de que pudiera perderme en las manos de Niall, Liam empezó a cantar.

“I’ve tried playing it cool, but when I’m looking at you, I can’t ever be brave, ‘cause you make my heart race”

Recuerdo que pensé que en mi vida había escuchado a una persona cantar mejor. Las voces de los cantantes suenan maravillosas en todas sus canciones, pero nunca puedes estar segura de cómo de editadas están. Bien, pues de todas las veces que había escuchado a alguien cantar en directo, jamás sonaban tan bien como Liam.

“Shot me out of the sky, you’re my kryptonite, you keep making me weak, yeah frozen and can’t breathe”

Inmediatamente me di cuenta de que Harry también superaba a los cantantes. No podría comparar su voz con la de Liam, porque eran… sencillamente diferentes. La de Harry más grave, tal vez algo más vibrante.

“Something’s gotta give now, ‘cause I’m dying just to make you see, that I need you here with me now, ‘cause you’ve got that one thing”

Llegados al punto en que Zayn empezó a cantar, yo ya estaba boquiabierta. Él sí que tenía una voz vibrante, y ese need you me hizo tener la sensación de que ese chico sería espectacular haciendo los altos en las canciones.

“So get out, get out, get out of my head, and fall into my arms instead, I don't, I don't, don't know what it is, but I need that one thing, and you've got that one thing”

Todos empezaron a cantar a la vez, y yo volví a fijarme en Niall, en cómo acercaba los labios al micrófono, en cómo acariciaba las cuerdas de la guitarra, en una vena que a veces se tensaba en su cuello, en la posición de sus piernas al cantar. Precisamente, empezó a cantar.

“Now I'm climbing the walls, but you don't notice at all, that I'm going out of my mind, all day and all night”

Tuve la sensación de que me miró en el you don’t notice at all, pero pudieron ser imaginaciones mías. Estaba demasiado perdida en la canción, en su voz, en la guitarra, en el ritmo, como para ser consciente de alguna otra cosa más.

“Something’s gotta give now, 'cause I'm dying just to know your name, and I need you here with me now, 'cause you've got that one thing”

Fue el turno de Louis, y no me sorprendió escuchar su voz más nasal que las demás, al igual que cuando hablaba. Podréis pensar que eso le hacía cantar mal, pero no era así. Al contrario, le daba un toque especial a su parte, una especie de sello de indentidad capaz de transmitir muchas emociones.

Siguieron cantando, repitieron el estribillo, y me di cuenta de que estaba siguiendo el ritmo con el pie y moviendo ligeramente la cabeza con la canción. No era una canción marchosa, ni una balada, pero tampoco era una canción cualquiera. Sinceramente, la única palabra que se me ocurre para describirla es fresca. Era una canción fresca.

Cuando terminaron de cantar, Steph y yo aplaudimos con fuerza, durante varios minutos. Los chicos nos miraron, casi sonrojados, y se estiraron para aliviar la tensión de los músculos. Nos quitamos los cascos y dejamos de escuchar lo que pasaba detrás del espejo, hasta que abrieron la puerta y fueron saliendo de uno en uno. Mi amiga y yo nos pusimos en pie y volvimos a aplaudir. Yo no creía que antes de eso hubiera tenido alguna vez tanto talento delante de mí, y a partir de ese momento miré a los chicos con más respeto, casi admiración.

-¡Guau! –exclamó Steph.

Asentí con la cabeza, intentando expresar que a mí también me había encantado. No sólo cómo cantaban, sino también la canción en sí. Eso me hizo pensar en que nunca había escuchado esa canción.

-Por cierto, ¿qué canción es? La habéis hecho genial –elogié.

Ellos se miraron. Yo me pregunté si habría dicho algo mal.

-Bueno, la canción no tiene nombre… aún –Zayn nos miró con un asomo de timidez.

Steph hizo un gesto de desconcierto, y yo abrí todavía más los ojos de lo que ya debían estar.

-¡LA HABÉIS COMPUESTO VOSOTROS! –casi grité.

-Sí.

-¡Es genial! –Steph volvió a hacer palmas.

-¿Os gusta?

-¿Qué? ¡Nos encanta! –exclamó mi amiga.

-Es muy buena, en serio –corroboré.

-¿De verdad la habéis escrito vosotros? –preguntó Stephanie.

-Sí –Louis rió.

-Y tú… tocas la guitarra de maravilla –le dije a Niall, en voz más baja.

-Gracias –bajó la vista-. Podría enseñarte, si quisie…

-¡Uhhhh! –escuché la voz de Louis a mi lado- ¡Os toca!

-¿Qué? –miré a mi alrededor, confusa.

-Bueno, habéis compartido café, ahora os toca compartir canción… -apostilló Harry- Una romáááántica.

-Pero… vuestra canción… vosotros… -balbuceé.

-Bah, ya habrá tiempo para elogios más tarde –Liam hizo un gesto quitándole importancia con la mano.

-Claro, venga, a cantar se ha dicho –Zayn nos empujó hasta la habitación de los micrófonos antes de que tuviera tiempo de resistirme.

Sé que lo he descrito muy confuso, pero es que pasó así. De repente estábamos felicitando a los chicos por su canción, y de repente estaba metida con Niall en una habitación, con un micrófono delante de mis labios. Bueno, a la altura de mi nariz, porque los chicos lo habían ajustado a su altura. Conociéndoles, no me extrañaría que lo hubieran hecho precisamente así a posta, para lograr confundirme y que aceptara cantar. De todos modos, tampoco han sido nunca unos chicos que se hayan alimentado de alabanzas, más bien al contrario. Sea como fuere, de repente estaba muy cerca de Niall y a punto de compartir una canción con él. Y ni siquiera sabía qué canción. ¿Qué más daba? Mis piernas parecían flan, y es que compartir una canción con otra persona es algo bastante delicado y cargado de sentimientos. Sólo esperaba que los míos no se notaran mucho.

[Por favor, no me odiéis. Tened paciencia conmigo y con la novela. Sé que va despacio -quizás ahora muy despacio- pero no puedo hacer los capítulos de demasiadas páginas en word porque con esta longitud ya tardo hora y media en escribirlos, así que la acción tiene que suceder así de lenta. Además, no pretendo que esto se base sólo en la relación protagonista-Niall, sino que haya algo más de trasfondo, de la amistad con los chicos, etc., y estas cosas tienen que pasar. Además, creo que One Thing y las voces de los chicos se merecen un reconocimiento especial. Intentaré que el próximo capítulo sea más asdfghjklñ porque sé que queréis que eso vaya llegando, y llegará. Espero que, aun así, este capítulo os haya gustado, y os propongo que me dejéis en los comentarios la canción romántica que os gustaría que cantaran Niall y la protagonista, y como aún no está pensada puedo escoger alguna de esas. Muchas gracias por leer y por la paciencia.]