miércoles, 7 de mayo de 2014

TESTIGOS DE LA LUNA - Capítulo 7.


I

Repentinamente rodeada de agua, Ayleen nada en busca del aire que le proporcionará la superficie. Cuando consigue alcanzarlo, respira con fuerza, llenando al máximo los pulmones, y furiosa, muy furiosa. Tarda sólo unos segundos en ver aparecer la cabeza de Derek, que se sacude el pelo y se pasa una mano por los ojos, para quitarse el agua de la cara.

-¡¿Pero qué haces?! –le grita ella, sin dejar de mover brazos y piernas para no hundirse.
-Tirarnos a la piscina –contesta Derek con naturalidad.
-Capullo. Ni siquiera me había duchado –le da la espalda y nada hacia el borde.
-Si crees que te va a dar una hipotermia, puedo darte calor corporal –dice con voz juguetona.
-Tu calor corporal es lo último que quiero ahora mismo.

Ayleen se impulsa con los brazos para salir de la piscina. Se sienta en el bordillo, con los pies en el agua, intentando recuperarse del susto. No esperaba que la tirase, y encontrarse de repente sin aire no es lo más agradable que le puede pasar a alguien. Por si fuera poco, Derek sigue mirándola con una sonrisa en los labios, y lejos de dignarse al menos a disculparse, sigue bromeando. Es imposible negar que ese joven tiene algo especial, pero ahora mismo Ayleen está demasiado enfurecida como para pensar en eso. 

-Seguro que no es lo último –Derek chapotea tranquilamente hasta llegar a donde ella, apoyando los brazos al lado de donde Ayleen está sentada.
-Seguro que sí –no le mira.
-¿Preferirías tumbarte en una alfombra de pinchos? 

Ayleen guarda silencio un momento. Ag, y encima le viene con tonterías que intentan ser ingeniosas.

-Probablemente –responde, seca.
-Ah, no me lo creo –Derek ríe. 
-Me parece estupendo.
-¿Te has enfadado?

Ella se digna a mirarlo. No parece arrepentido, y aunque lo pareciese, está segura de que no se arrepiente lo más mínimo, al contrario, todo aquello le divierte enormemente. Los ojos negros de Derek aprovechan para penetrarla, y Ayleen se ve obligada a apartar la mirada o se rendirá demasiado fácilmente.

-Sí.
-¿Cuánto?
-Mucho.

Entonces nota algo en la planta del pie, y tras dar un respingo le entran unas ganas enormes de reír. Cosquillas. Aquel creído desconsiderado se está atreviendo a hacerle cosquillas. Aguanta la risa y saca los pies del agua.

-Creía que habías accedido a bañarte –la mira conforme se levanta.
-Yo creía que eras lo suficientemente caballeroso como para no tirarme sin previo aviso.
-Si te hubiera avisado no me habrías dejado tirarte. Y los caballeros están ya muy vistos –hace un además negativo con la mano. 

Ayleen se da la vuelta para marcharse, pues no cree que deba seguir allí con ese chico. Tiene una mezcla muy extraña de sensaciones, porque por un lado sabe que no le ha gustado nada que la tratase de esa forma, pero por otro la compañía de Derek le resulta interesante. Pero no, no va a estar más rato con él. La ha hecho sentirse mal cuando la ha tirado, avergonzada, aun cuando ya no queda nadie allí. Todo el mundo se ha marchado ya de la piscina, y lo cierto es que debe estar haciéndose tarde porque el cielo empieza a adquirir tonos rojizos. 

-¿Ya te vas? –escucha la voz de Derek, que ha salido también de la piscina, justo detrás de ella.
-Sí, después de este fugaz e inesperado baño –deja salir su tono más sarcástico.
-Ha sido fugaz porque tú lo has querido –dice él, y Ayleen adivina una sonrisa prepotente en sus labios.
-Adiós, Derek. 

Antes de que pueda echar a andar, nota una mano apartando su pelo mojado a un lado, y unos labios rozándole el lóbulo de la oreja. Ayleen se queda muy quieta, sin saber cómo reaccionar.

-Adiós, pelirroja –le susurra al oído.
-Ag.

Con un bufido, pero también con un estremecimiento, Ayleen entra de nuevo en la residencia sin mirar atrás, pero no porque no se fíe de Derek sino porque no se fía de sí misma.


II

Owen acaricia casi inconscientemente el trasero desnudo de su novia. Natasha está a su lado, bocabajo y con los ojos cerrados, si bien él sabe que está despierta. Todavía entra algo de luz por la ventana y los colores del crepúsculo se reflejan en la piel de la joven. Es despampanante. Owen es consciente de que es difícil encontrar a una chica como ella, y menos cuando Derek está cerca. Claro que Natasha es la hermana de su amigo. Y ahora es suya. Única y exclusivamente suya. Aprieta su nalga, sintiendo muchas ganas de volver a acostarse con ella. Explora un poco más hacia abajo y consigue que ella reaccione, girando la cara para mirarle. 

-¿Otra vez? –Natasha tiene el pelo algo despeinado, lo que le da un atractivo toque salvaje.
-Por supuesto –continúa acariciándola.

Ella gime, y Owen, por algún motivo, piensa en lo que ha pasado en el desayuno de esa mañana. Natasha saludó a la bonita chica pelirroja y a su amigo, Connor Ackland. Parece que ahora su novia quiere llevarse bien con la nueva, y eso implica la posibilidad de que empiece a relacionarse con Ackland. Otra vez. Owen atrae a su novia hacia sí con fuerza y la sujeta por la barbilla.

-¿Qué ocurre? –pregunta ella, alarmada.
-No quiero que hables con ese gilipollas de Ackland –acaricia ahora sus muslos.

El ceño de Natasha se frunce.

-No te entiendo. No he hablado con él.
-Pero no quiero que lo hagas.
-No lo haré –lo tranquiliza ella.
-Bien.

Owen la besa con fiereza. Natasha es suya y de nadie más. Tiene que encargarse de que ese imbécil no vuelva a querer absolutamente nada con ella. En cualquier caso, ahora se conforma con la palabra de su novia y con volver a poseerla con fuerza. 


III

Connor da dos golpes suaves en la puerta. Acaba de llegar de dar las clases a los niños y prometió a Ayleen que la avisaría cuando volviera para que fuesen a cenar juntos. Sin embargo, la puerta no se abre, ni tampoco se escucha ningún ruido dentro de la habitación. Pero al darse la vuelta para marcharse, casi se choca con ella; igual que pasó ayer, cuando la conoció. Esta vez, en cambio, viene liada en la toalla que se ha comprado esa mañana, el pelo mojado y su ropa en la mano. Ayleen está sonriente, radiante, con la piel algo rosada por el sol. 

-Vaya, ¿has estado en la piscina? –le pregunta Connor, aunque la respuesta sea obvia.
-Pues… sí –se la ve indecisa, pero sigue sonriendo-. No podía esperar a estrenar el trikini. 
-Ya veo –Connor también sonríe-. ¿Y con quién…?

El joven empieza a preguntar e inmediatamente ella abre la puerta, invadida por una repentina y extraña prisa. 

-¿A qué hora era la cena? 

Connor no está seguro de si Ayleen no ha escuchado que estaba empezando a hacerle una pregunta o si deliberadamente le ha ignorado, pero se resigna, pensando que ya tendrá tiempo de preguntarle en otro momento.

-El comedor está abierto ya. Cierra en una hora y media.
-Vale, dame media hora para que me duche y nos vemos abajo–se quita la toalla y la deja en la silla del escritorio.

Connor respira hondo al volver a verla en bikini. Le sienta de maravilla. 

-Claro –él sonríe y se da la vuelta.
-¡Hasta luego! –se despide ella antes de cerrar la puerta.

Ayleen suspira. Coge su toalla de ducha y se mete en el cuarto de baño. No ha querido decirle a Connor que, entre unas cosas y otras, ha pasado una buena parte de la tarde con Derek. Sabe que a él no le gustaría, no se caen bien. De todos modos, tampoco hay necesidad de decírselo. Sólo lo omitirá, porque no quiere que el chico rubio la mire ni siquiera la mitad de mal de lo que mira a Derek. 

La joven pelirroja se ducha tan rápido como puede, se echa algo de espuma en el pelo y se viste. Tiene el pelo húmedo, pero han pasado ya cuarenta minutos y había quedado con Connor diez minutos atrás. En fin, al menos tiene la excusa de que las chicas siempre llegan un poco tarde. Cierra la puerta de su habitación y casi se marcha sin darse cuenta de la nota que hay pegada en ella. Mira a los lados, pero no ve a nadie cerca. Despega la nota y la lee.

“¿Cenas conmigo? A las diez, fuera de la residencia. Si quieres. Espero que me hayas perdonado.”

Ayleen vuelve a mirar a los lados. Sabe perfectamente que es Derek, a pesar de que nunca ha visto su letra. Es descuidada, como todo él aparenta -hasta cierto punto- ser. Le resulta una invitación interesante, pero también le apetece cenar con Connor, al que además no ha visto a lo largo de la tarde. Y no sabe qué intenciones tiene Derek con ella, mientras que Connor parece querer ser su amigo. Así que hace una bolita con la nota, la tira en la papelera de al lado de la escalera, y se va a cenar con el joven de sonrisa encantadora. 


[Parece que la mayoría de vosotras es #teamderek, pero sigue habiendo algunas que me dicen que Connor es adorable, y la verdad es que es muy majo él. Ayleen ha decidido ignorar a Derek, pero, ¿creéis que él se contentará con eso? ¿O tal vez Ayleen se arrepienta y decida ir con él después de estar un rato con Connor? Como siempre os digo, podéis hacer adivinaciones en los comentarios del blog, y si también en menciones por twitter pues mejor que mejor, os lo agradeceré mucho y seré muy feliz cuantos más comentarios tenga. Nada más, sólo gracias por leer]

7 comentarios:

  1. Ai, como me está encantando estr imagina ♥
    Pues yo soy mas de Connor, no sé, me parece más tierno, más adorable, y eso (: Aunque Derek tiene ese aire de.. chulico y malote que.. pues tambien enamora (:
    Bueno, no se que mas ponerte :$ Que me está gustando muchisimo. Tu tienes que escribir algún libro, de verdad.

    Muchísimos besos ♥
    Te quiero (: @ittsadreamer

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  2. ¡Ana! :3
    He conseguido sacar un poquito de tiempo libre para poder leer estos capítulos que me quedaban, así que haré un breve comentario.
    A mí los escenarios de las piscinas me gustan, no sé por qué, así que estos dos capítulos pues ya te puedes imaginar. Me han encantado, como siempre :3 Sinceramente, creo que me declaro #teamderek JAJAJAJAJAJAJA He leído muchos libros románticos y me he dado cuenta de que los chicos malos me gustan ;) Aunque tengo la sensación de que quizá éste que tú has creado sea un poco diferente... Aun así, me gusta. Por supuesto, Connor me parece muy adorable pero Derek... Es mucho Derek jajajaja
    Bueno, espero poder comentar algún día más, pero con el horario que tengo... Pf. Yo te animo a que continúes escribiendo :) Síguela pronto, está genial.
    Besos.
    (@_mysexymalik)

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  3. Buah me encantaaaaaaa!
    Bueno, soy mas de Connor y Derek... no sé, tuve una experiencia mala con un chico que es igual que él y ... prefiero a Connor.
    Un beso guapa! Escribe pronto ♥

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  4. Ayyyyyy derek q maloteeee! Jajajajaj aunque connor es muy majo tmbn... A ver q en el próximo cap !!! Seguro q nos sorprendes como siempre ;)) . muchos besosss Ana

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  5. Yo sin duda soy #teamconnor, es más adorable, más majo, menos prepotente y chulo que Derek que parece que solo quiere a las chicas por el simple hecho de tener sexo. Así que me quedo con Connor de momento.
    Respecto a la historia, ¡la adoro! es perfecta, es tan genial, tan asdfghjk Sé que quizás no haya tantos comentarios, pero a mi me encanta. Es la única novela que me he leído y estoy leyendo por internet que no sea de los chicos, y debo admitir que me tiene enganchada.
    Un placer leerte porque lo haces genial.

    Atentamente, una anónima para que sonrías :-))

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  6. Holiiiis :3 ¿Qué tal?

    Me ha encantado el capítulo, en serio. Cada vez me gusta más la novela :')

    Por supuesto #TeamDerek pero como tú dices, Connor es adorablemente adorable :D

    En fin, que me encantaaaaa. Espero que sigas prontooo :3

    Besoos, preciosa xx

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Motivos para sonreír.